Es imprescindible que se dedique un
tiempo diario a la lectura, tanto en la escuela como en casa.
Para ello, se pueden emplear técnicas
de lectura conjunta donde, con la supervisión de un adulto, el niño realizará
las lecturas en voz alta alternando con el adulto para posteriormente dialogar
acerca de lo que han leído.
ÁREAS EN LAS QUE SE PUEDEN OBSERVAR DIFICULTADES
· En los procesos sintácticos:
a) Estructuras gramaticales: Cuando tiene
dificultades en la identificación de los componentes sintácticos de la oración.
Se le puede ayudar mediante una serie de
claves externas y tareas tales como:
- Coloreando en
un determinado color el sujeto de la oración y de otro color el predicado y
utilizando distintas estructuras de oración para que el alumno se dé cuenta de
que el sujeto de la oración no tiene por qué ir siempre en primera posición,
sino que depende del tipo de oración.
- Practicando
con tareas de emparejamiento de dibujos con oraciones que tengan distintas
estructuras sintácticas.
- A través de
ejercicios de completar oraciones, colocar los componentes que faltan: unas
veces faltará el sujeto, otras el verbo, otras el objeto, otras las palabras
funcionales, etc.
b) Signos de puntuación: Algunas de las actividades
que se pueden realizar son:
- Presentar un
párrafo corto con los grupos sintácticos exageradamente diferenciados mediante
flecha, dibujos o aumento considerable del tamaño. El alumno lo leerá con la
ayuda visual necesaria hasta que logre automatizar el respeto de los signos que
aparecen en el texto. Poco a poco la ayuda visual deberá ser menor.
- Leer
conjuntamente (profesor- alumno) varias veces un texto, marcando muy bien los
signos de puntuación, hasta que el alumno realice una ejecución aceptable.
- Presentarle
sencillos textos bien puntuados para que los lea en voz alta y grabarle la
lectura para que luego escuche y observe sus errores.
· En los procesos semánticos. La comprensión
de textos es un proceso complejo que exige del lector, al menos, tres
importantes tareas:
a)
Extracción del significado: Cuando tienen
dificultades en extraer el significado del texto porque no son capaces de
distinguir las ideas principales de las secundarias, la recuperación debe
centrarse en enseñarles a identificar la importancia relativa que adquieren las
distintas partes del texto y/o párrafo.
- Una posible
estrategia puede ser la siguiente: primero, se lee un párrafo o un pequeño
texto. Después, se subrayan las palabras o frases claves. Luego, se dice la
idea principal que contiene o se escribe al margen. Por último, se comentan y
comparan grupalmente los resultados y se llega a un consenso.
b) Integración en la memoria: Cuando la
información previa del alumno es escasa para comprender el texto, es necesario
aportar los conocimientos que sirvan para sustentar la nueva información. La
intervención del profesor debe cumplir un doble objetivos. Por un lado, conocer
la situación del alumno en cuanto a la información que posee sobre el tema. Y,
por otro, contribuir a regular la aportación de información, mayor o menor, que
tiene que ofrecer en función de lo que los alumnos ya saben.
c) Realización de inferencias: El proceso
más complejo que los alumnos tienen que realizar para una completa comprensión
del texto es hacer deducciones y comprender lo que está implícito en el mismo. Algunas
de las actividades que se pueden realizar son las siguientes.
- Hacerle
consciente de que el objetivo de la lectura es obtener información y de que es
necesario utilizar lo que ya sabe para comprender un texto.
- Formular
preguntas sobre el texto que no estén explícitas en el mismo y hacer que él
formule también otras.
- Localizar
en el texto las acciones sobre las que es necesario hacer inferencias.
- También
es necesario que los alumnos hagan predicciones y sean capaces de anticipar lo
que va a suceder cuando están leyendo.
·
También, podemos querer mejorar la velocidad lectora: para ello se
puede utilizar el método de lecturas repetidas.
COMPRENSIÓN LECTORA
La
comprensión lectora es una de las competencias lingüísticas que mayores
dificultades entraña.
El
tratamiento didáctico de la comprensión lectora en los libros de lectura
convencionales suele limitarse, por lo general, a ofrecer al alumno una
relación de preguntas que aparecen al final de un texto de mayor o menor
extensión y que, más la comprensión verbal, ponen a prueba la capacidad de
memoria inmediata (aunque este proceso psicológico básico forma parte de la
comprensión lectora, no es único). Con ello, difícilmente pueden cumplir estas
actividades una finalidad facilitadora de la comprensión para aquellos alumnos
y alumnas que, por alguna razón u otra de carácter psicopedagógico, manifiestan
escasas habilidades para comprender lo que leen.
- Estrategias
cognitivas de lectura comprensiva
El
propósito de las estrategias cognitivas que se describen es el de lograr que
el/la alumno/a sea consciente de que posee unas habilidades para leer
eficazmente a través de la utilización de unas estrategias mentales que
pretenden manipular el texto, para extraer de él la máxima información
significativa y almacenarla en su memoria. De este modo, podrá posteriormente
acceder a ella con mayor facilidad.
Las técnicas que se proponen
son:
Relectura: Consiste en releer todo el párrafo, texto o tramo lector en donde se
haya producido una dificultad de comprensión. A la vez se disminuye la
velocidad lectora, leyéndose tantas veces como sea necesario hasta lograr una
mayor comprensión.
Lectura recurrente: Es una estrategia de organización del material lector que consiste en
volver a leer una parte del texto para afianzar su almacenamiento en la
memoria. Puede realizarse cuantas veces sean necesarias para lograrlo. Se
diferencia de la estrategia anterior (relectura) en que en la recurrente el objetivo es consolidar una comprensión, mientras
que en la relectura se pretende comprender o solucionar una dificultad de comprensión.
Lectura continuada: Consiste en continuar leyendo el texto después de haber encontrado una
dificultad hasta encontrar más información en las siguientes oraciones/párrafos,
que pueda servir para lograr su comprensión.
Lectura simultánea: Supone un parafraseo de la parte del texto con dificultad en su
comprensión. Consiste en una "traducción" simultánea utilizando
otras expresiones lingüísticas: oraciones, nuevas palabras, etc., con el
propósito de hacer más inteligible su contenido.
Imaginar el contenido del texto: La estrategia consiste en generar imágenes mentales
sobre aquellas partes o elementos que integran el párrafo en donde se encuentra
la dificultad.
Formular hipótesis: Consiste en "adivinar" lo que no se comprende mientras se va
leyendo, intentando contrastar la hipótesis en los párrafos siguientes al que
contiene la dificultad.
Aplazar la búsqueda: Al encontrar una información en el texto que parece confusa puede
utilizarse la estrategia de la relectura. Si a pesar de ello no se logra la
suficiente comprensión, puede "aplazarse" la comprensión, derivándola
a la indagación en otros textos o preguntar al profesor.
- Estrategias
metacognitivas de comprensión lectora.
La
metacomprensión lectora se define como el conocimiento que tiene el/la lector/a
acerca de las propias estrategias con que cuenta para comprender un texto
escrito y al control que ejerce sobre las mismas para que su comprensión
lectora sea óptima.
Las estrategias metacognitivas
a emplear son las siguientes:
A) Habilidades de planificación.
Son
todas aquellas que se consideran previas al inicio formal del acto lector.
Preparan al alumno a afrontar la lectura con unas "herramientas" o
técnicas facilitadoras para la comprensión de la lectura.
Ideas previas: Consiste en relacionar la información nueva con los conocimientos previos
que se poseen acerca del texto que se va a leer. Antes de iniciar la lectura se
le debe proporcionar al alumno información sobre el título, contenido, resumen,
características generales, etc. de la lectura de modo que active las ideas que
pueda poseer sobre ello y se "enfrente" a la lectura con cierto
bagaje basado en sus experiencias lectoras anteriores.
Objetivos de lectura: Antes de iniciar la lectura es deseable que el/la alumno se proponga
unos determinados objetivos. ¿Para qué voy a leer este texto? La respuesta a
esta pregunta debe establecer los objetivos; el alumno o alumna puede leer
para: contestar a unas preguntas conocidas, leer para aprender una definición,
leer para encontrar un dato numérico, leer para pasar un rato divertido, leer
para conocer el programa de televisión, leer para seguir las instrucciones del
montaje de un sencillo aparato, leer para Son
múltiples los objetivos que se pueden establecer y que, desde el punto de vista
motivacional, crean una dirección lectora en el alumno: se lee para algún fin
determinado. Conocer este propósito constituye una concienciación del proceso
lector y, por ende, el empleo de estrategias de metacomprensión.
Planificar estrategias de comprensión: ¿Qué estrategias emplearé para comprender? En esta
fase inicial antes de comenzar formalmente la lectura, debe plantearse qué
estrategias (cognitivas y no cognitivas) deberán emplearse para asegurar que se
comprende bien lo que se va a leer. Se trata de concienciar al alumno de que
verbalice frases tales como: Cuando encuentre una palabra o frase que no
entienda la leeré dos o tres veces (relectura); cuando haya leído un
párrafo lo volveré a leer para asegurarme de que lo he entendido bien (lectura
recurrente); cada punto y aparte cerraré los ojos durante un momento y
trataré de imaginarme durante unos momentos lo que estoy leyendo y luego
seguiré (imaginar el contenido del texto); también puedo emplear la
estrategia de "adivinar" lo que ocurrirá en los renglones siguientes
(p.e. : seguro que este personaje lo que hará ahora es que ... voy a
comprobarlo si es así); para entender bien lo que haré es traducir a mis
propias palabras lo que no entienda (p.e.: los mozos eran locuaces y
dicharacheros: los jóvenes hablaban mucho).
B) Habilidades de supervisión.
Consisten
en controlar el proceso lector a través de las estrategias que previamente se
habían establecido en la fase anterior. Las habilidades que debe poseer el
alumno o que debemos entrenar son las siguientes:
Reflexionar sobre sus objetivos. Lo podemos realizar a través de la formulación de
preguntas tales como: ¿Estoy consiguiendo lo que quería antes de leer?
(p.e.: aprender una definición, pasar un rato agradable, saber).
Detectar aspectos importantes. A lo largo de la lectura pueden hacerse detenciones
breves para preguntarse si lo que se acaba de leer es importante o no lo es
tanto, con el objeto de realizar una lectura recurrente para afianzar su
comprensión.
Identificar las causas de la no comprensión. Es aconsejable que el/la alumno/a aprenda a
formularse preguntas del tipo: ¿por qué no comprendo esto?, ¿será porque leo
muy deprisa? ¿por qué no estoy atento/a?, ¿porqué...?
c) Habilidades de evaluación.
Finalmente, deben establecerse actuaciones
evaluadoras de la lectura a través de la formulación de preguntas del tipo:
¿qué es lo que he comprendido? ¿Dónde he tenido dificultades? ¿Me han servido
las estrategias de comprensión que he empleado en la lectura?
El
tipo de actividades
de comprensión lectora propuestas son las siguientes:
Reconocer el significado de las palabras. Mediante la lectura de textos propios del nivel y
de una amplia variedad de ellos (cuentos, poesías, relatos, descripciones,
fábulas, etc.)
Reconocer el significado de las frases. También mediante la lectura de textos variados
propios del nivel.
Seguir instrucciones sencillas de un texto. El alumno o alumna deberá realizar una actividad
sencilla propuesta por la frase (niveles muy simples de comprensión).
Identificar sinónimos de un texto. Señalar, asociar, descubrir o localizar palabras
con el mismo significado.
Identificar antónimos. Señalar, asociar, descubrir o localizar palabras de significación
contraria.
Integrar el significado de una frase. Se trata de explicar el significado de frases
incompletas. P.e.: ayer…..la mañana me……..de paseo…………mis………….al campo.
Fijar la información (memoria). Después de una lectura sencilla y corta el/la
alumno deberá contestar a preguntas sobre la misma.
Retener la información y evocarla. Al cabo de unos días de haber trabajado una
lectura el/la alumno/a hace algún comentario acerca de ellas.
Identificar acciones. Señalar lo que hacen cada uno de los personajes de un texto.
Resolver analogías verbales. Juegos de lenguaje que estimulan el razonamiento
verbal. Actividades del tipo: El pan se come y el agua se………………
Extraer la idea principal de un texto. Señalar ideas principales en textos breves,
discriminándolas de otras ideas más secundarias.
Identificar las ideas secundarias. Después del aprendizaje de la idea principal el/la
alumno aprenderá a distinguir otras ideas existentes en el texto que son de
carácter secundario o de menor importancia que la extraída como principal.
Resumir el texto. Aprender a sintetizar un texto en otro de menor número de palabras
que exprese lo fundamental del mismo.
Contextualizar el significado de palabras. Señalar el significado que tiene una determinada
palabra en la frase. Por ejemplo: echó la última carta en la partida y
perdió. Elige el significado de "carta" más adecuado: carta de la
baraja (naipe) o carta escrita a alguien.
"Traducir" significados de palabras nuevas
al vocabulario personal. (La
denominada lectura simultánea). Consistente en explicar frases de manera
inteligible y comprensible y no con carácter mecánico y memorístico.
ORIENTACIONES
Además,
os ofrecemos “aquí” unas orientaciones que os pueden servir para contribuir también,
desde otros contextos comunicativos, al desarrollo de esta área.
MATERIALES
Adjuntamos también un
pasatiempo, una sopa de letras con vocales, tanto en mayúscula como en
minúscula.
Por
último, hemos seleccionado diferentes materiales útiles para trabajar:
Discriminación
perceptiva de vocales y consonantes
Lectura de palabras: palabras y lectura rápida
Comprensión lectora: cuentos interactivos con actividades y fichas de comprensión lectora.
Qué cantidad de información, es genial. Muchas gracias.
ResponderEliminarYo estoy leyendo ahora un libro muy completo e interesante sobre la intervención de la dislexia, que os comparto por si os interesa: https://www.diverlexia.com/metodo-diverlexia/
Un saludo.
Sara G.C.
Otro recurso que me encanta para trabajar la lectoescritura de una manera divertida, y que quizá ya conocéis: https://www.neuronilla.com/gramatica-de-la-fantasia-aportes-para-contar-historias/
ResponderEliminarHola Sara, gracias por tus comentarios y aportaciones, para eso hemos creado el blog, para compartir recursos. En la pestaña de escritura, en el apartado de escritura creativa, hemos añadido algo sobre Rodari, esperamos que te guste. https://drive.google.com/open?id=1OS4JH-Ls94I5OXkjgJRGumQEKHjTSWv_
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